El Pueblo

Albarca es una pequeña población agregada desde el año 1846 al término de Cornudella de Montsant. Históricamente formó parte del Condado de Prades y fue municipio independiente hasta mediados del siglo XIX.

Albarca significa, en árabe, «montaña bendita». Albarca es el nombre que recibía la sierra de Montsant antes de la reconquista cristiana a mediados del siglo XII. El nombre le viene, muy probablemente, a la gran cantidad de ermitaños que los árabes encontraron en esta sierra.

Actualmente, aún conserva una veintena de casas, la iglesia con el ábside románico y las tumbas de origen medieval. Es conocido por ser el pueblo más pequeño de Cataluña y por ser puerta de entrada a la sierra del Montsant.